Barillas es, hoy por hoy, la expresión más clara del enfrentamiento entre la apropiación capitalista en Guatemala y las comunidades campesinas, principalmente indígenas. Esto no quiere decir que sea el único lugar donde se está buscando imponer la forma extractiva del capital (minas, hidroeléctricas). Por el contrario, el territorio en Guatemala está sufriendo un nuevo ataque del capital desde la explotación de la fuerzas de la naturaleza. Cientos de comunidades en Perú, Bolivia, Ecuador, México, Chile y Brasil están en abierta contradicción con este impulso capitalista, siendo los Estados particulares parte central en la dominación que se desea imponer, incluso en aquellos que se dicen de izquierda. Barillas es en la particularidad de Guatemala un momento central de la lucha entre el Estado-capital y las comunidades campesinas. El hecho de que haya estallado la primera gran revuelta allí, en el norte de Huehuetenango, más bien es un llamado para prepararnos en lo que posiblemente se puede venir como ataque armado estatal o capitalista contra las comunidades q'eqchies de las Verapaces e Izabal, en San José del Golfo-San Pedro Ayampuc, en la región ixil, en San Juan Sacatepequez o en las comunidades de la Costa Sur.
Por Sergio Palencia
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